miércoles, 23 de enero de 2013

Se trata de un loco asesino psicópata....

Al hilo de esto: Petición: A los directores de Informativos.... Se trata de un loco asesino psicópata.... Todos hemos leído u oído en algún momento apostillar una noticia sobre un suceso violento con frases como: “el agresor padecía una enfermedad mental”, “el atacante había sido internado en varios ocasiones por una esquizofrenia”, “el asesino estaba desde hace años a tratamiento psiquiátrico”. Es un acto periodístico en la que el informador sugiere que la locura o la enfermedad mental son los causantes de un acto violento. Esto tiene que ver con cierto prejuicio y con una gran hipocresía. Para que sea hagan una idea, es como cuando alguien se muere de cáncer y el periodista dice “falleció de una larga enfermedad”. Es un detalle supuestamente condescendiente con la familia y que intenta fallidamente no caer en el morbo. Intento totalmente fracasado porque ya todos sabemos de que se trata. Del mismo modo que cuando alguien se muere de sida lo que dicen es “murió de cáncer” (veasé recientemente el reporte de Antonio Vega) Digamos que en la escala periodística de ser cotilla y morboso,el sida esta por encima de cáncer y cáncer por encima de larga enfermedad. Osea, que en cualquier momento la gente morirá de ” algo en general” o “fruto de un exceso de miasmas”. El caso es que la frase de marras “el acusado padecía una enfermedad mental” transmite también esta ambigüedad periodística a caballo entre el morbo el rigor y la tontería. Quizás se pueda elucidar algo sobre esta cuestión para sacar a los periodistas de este atolladero. Es verdad que algunos personas diagnosticadas como enfermos mentales cometen actos violentos. Si bien no más que la población no diagnosticada. Se dice habitualmente que la tasa de agresiones en el consultorio de urgencia de psiquiatría es la misma que en urgencias generales. Aún así se puede razonar que hay gente que comete delitos atroces que son argumentados por sus autores de forma absolutamente delirante. En la historia de la psiquiatría existen varios casos muy estudiados como son el famoso caso Wagner o el caso Aimeé. Más conocidos para el público general está también el caso de Charles Manson o los recientes Jared Lee Loughner de la masacre de Tucson (Arizona), y Anders Behring Breivik autor de los asesinatos en Oslo y Utoya (Noruega). Gente delirante y violenta, que además le da a la violencia un lugar principal en la consecución de sus logros delirantes. Lo que hay que precisar es: ¿las ideas delirantes son la causa de las atrocidades cometidas por estas personas? A diario gente supuestamente no loca comete barbaridades y toma decisiones que provocan la muerte de personas siguiendo ideas políticas y/o ideas religiosas fanáticas. En muchas ocasiones esto sucede con el apoyo generalizado de poblaciones enteras. Y nadie se plantea que estén locos o que sean víctimas de sus ideas. Por otro lado existen miles de personas delirantes que conviven con la certeza de estar a merced de múltiples maldades cometidas por parte del gobierno, la cia, microsoft o su vecina. Viven y se pelean a diario, luchan por mantener su integridad dentro del delirio de que siempre hay alguien pendiente de ellos. Eso si, bajo ningún concepto se les ocurre agredir o matar a nadie. Al revés, son gente que vive en un perpetuo miedo. Parece entonces mas bien una cuestión ética. No se trata del poder de las ideas o de su carácter patógeno sino del respeto a la vida ajena. Y es que ser un hijo de puta malvado no responde a cuestiones de psicopatología. Lo que si nos enseña la historia de la psiquiatría es que este tipo de personas si son tratadas como enfermos mentales y desposeídos de la responsabilidad de sus actos, esto no hace mas que empeorar el cuadro aumentando la producción delirante en pos de conseguir la estabilidad de su identidad. Resumiendo: Que no seamos capaces de entender las razones por las cuales una persona comete un acto violento no convierte al sujeto en víctima de su pensamiento. Es más, que la violencia tenga un diagnóstico no nos da ninguna tranquilidad con respecto a los seres humanos. Todos siempre podemos elegir entre matar o no hacerlo.